Mantener el equilibrio correcto de la química del agua de la piscina es clave para mantener la salud de tu familia y prevenir picazón, ardor y bacterias. Y hay una cantidad de factores que pueden alterar el equilibrio, desde la luz solar hasta los desechos que caen dentro o los aceites corporales.
Conserva a mano las tiras o el kit que hayas utilizado para realizar las pruebas para poder verificar el agua todos los días y asegurarte de que los niveles sean los correctos. Aquí tienes una guía que te servirá de ayuda:
Qué medir
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Qué significa
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Rango ideal (ppm = partes por millón) |
Cuándo probar
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Alcalinidad
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La capacidad que tiene el agua de resistir los cambios del pH |
110-150 ppm |
Semanalmente |
pH |
La medición del ácido o basicidad del agua en una escala de 0 a 14. Un pH inferior a 7 indica que el agua es ácida, mientras que si es superior a 7 indica que el agua es alcalina (básica). El equilibrio correcto minimiza la irritación de los ojos, reduce el mal olor, previene la corrosión, mantiene el agua clara y evita el sarro (crecimiento de depósitos minerales en las superficies de la piscina y el equipamiento, que puede impactar en su rendimiento). |
7.4-7.8 |
Diariamente |
Cloro libre disponible |
La cantidad de cloro activo en el agua que puede destruir las bacterias, las algas y otra materia orgánica. |
1.0-3.0 ppm |
Diariamente |
Dureza cálcica |
También denominado carbonato de calcio. Si bien es bueno que haya algún grado de dureza para reducir las probabilidades de corrosión, un nivel alto indica que hay mayores probabilidades de que se forme sarro. |
Menos de 250 ppm |
Semanalmente |
Ácido cianúrico
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Un estabilizador que reduce la pérdida del cloro libre disponible debido a la luz del sol y la evaporación. |
25-50 ppm (no debe exceder nunca las 100 ppm) |
Dos veces por temporada |